Comenzamos la cuarta clase recordando que las horas de práctica de las semanas del 8 al 14 y del 15 al 21, se utilizarán para intercambiar ideas y preparar los trabajos grupales que expondremos a lo largo de los meses abril y mayo.
La primera actividad que se planteó fue la visualización de un video donde Mirta, profesora de un colegio cercano a la localidad de Candás, enseña a su alumnado de preescolar, 1º y 2º de primaria cómo construir las ideas de lateralidad (izquierda, derecha, arriba y abajo) dibujando en la pizarra un geoplano de 3x3 que representa el barrio de un niño llamado Timoteo y planteando la siguiente pregunta: “yo quiero ir desde la casa de Timoteo hasta la de Tania (desde una punta del geoplano hasta la otra), ¿de cuántas maneras distintas lo puedo hacer?”
Todos los cursos conocían ya el geoplano porque anteriormente habían jugado con él, pero esta vez se les propone una actividad dirigida.
Los pequeños trazarán el recorrido que más les guste en sus cartulinas y lo copiarán en su geoplano (de idéntico tamaño al que tienen delante), para más adelante compararlos, mientras que los mayores, van a encontrar todos los posibles recorridos que se pueden construir con 4 gomas desde una esquina a otra, discutirlos y construir la idea de recorrido con esquemas del geoplano; de esta manera planteamos la misma tarea a todos los cursos pero adecuándola a las distintas edades. Seguidamente, la maestra coloca en el mismo sentido a su clase de preescolar para que no tengan problemas de lateralidad (de esta forma manejan la misma derecha y la misma izquierda).
El lenguaje que utilizan es el que utilizamos todas las personas (por aquí, por allá, por allí), pero más adelante tendrán que decir el mensaje al grupo utilizando los términos arriba, abajo, izquierda y derecha, por lo que Mirta traza algunos recorridos en la pizarra y los verbaliza para que les sea más fácil.
Mientras, los cursos superiores se autorregulan, asumiendo ellos mismos las consignas e impidiendo que se hagan trampas o se cometan errores; pero, al existir únicamente 6 caminos, pronto se encuentran con problemas para identificar los que aún no se han construido y Mirta tiene que intervenir facilitándoles una pista: simplemente les hace ver cuántos recorridos empiezan hacia arriba (3) y cuantos hacia la derecha (otros 3), de esta forma les hace pensar qué han hecho y como pueden avanzar, actuando en la zona de desarrollo potencial, ya que ellos mismos con esta pequeña ayuda luego no encuentran dificultad para resolverlo.
Desarrollan con las gomas la acción, formulan el recorrido que han realizado y lo llevan a su dibujo, luego utilizan únicamente flechas y por último lo interiorizan para, de manera verbal decir los caminos sin necesidad de recurrir ni a la acción ni a la formulación (estas son las 4 situaciones educativas más comunes que utilizaremos en la elaboración de unidades didácticas de infantil en el área lógico-matemática).
En este video también pudimos observar de manera muy clara dos cosas: el pensamiento egocéntrico típico del alumnado de preescolar, con uno de los peques que mientras hace el recorrido piensa y cuenta cosas de temas distintos al que está tratando y en los primeros minutos de video, cómo Mirta “mete la pata” preguntando a toda la clase para luego reñirles cuando intervienen simultáneamente, aquí, Josetxu nos explicó que es algo inconsciente para los docentes, ya que son los que controlan.
La segunda actividad propuesta, consistió en matizar y complementar el ejercicio de Mirta poniendo en cuestión si de verdad sabemos o no sumar y la diferencia que existe entre sumar lados y sumar cuadrados, a través de unas presentaciones que podemos encontrar en el blog y en el campus.
Josetxu nos explicó que ante la pregunta ¿sabes sumar? siempre hay que responder depende; para demostrar su teoría, nos propuso una actividad dirigida a maestros de infantil, últimos cursos de primaria y educación secundaria (no para alumnado de infantil): tenemos 5 cuadrados (de 10, 20, 30, 40 y 50 unidades) y tenemos que quitar 2 de estos cuadrados, de manera que de los 3 restantes, 2 de ellos ocupen el tercero, ¿cuáles hay que quitar y cuáles hay que dejar? Hicimos la primera prueba con una suma básica (10 + 20 = 30) y vimos que si se coloca el cuadrado de 10 encima del cuadrado de 20, no ocupa el de 30. Esto mismo lo hicimos con el resto de cuadrados y efectivamente la respuesta no era una suma “básica” de lados. ¿Cómo es posible esto? Pues el profesor nos mostró cómo descomponiendo el cuadrado de 40 en 4 tiras y poniéndolas alrededor del cuadrado de 30, se conseguía formar el cuadrado de 50. La explicación a esto es bastante simple: si quitamos los ceros a 30 y 40 nos quedan los números 3 y 4, si en un cuadrado tengo de lado 3 y en otro cuadrado tengo de lado 4, el cuadrado suma de los dos será 5, no 7 (32 + 42 = 52), es decir, 9 + 16 = 25. Por lo tanto, ¿sabemos sumar? DEPENDE, si sumamos cuadrados en vez de lados, empezamos a dudar; en vista de esto, sabemos sumar algunas cosas, pero la gran mayoría de los elementos del planeta y los que se construirán en el futuro, no tenemos ni idea de sumarlos porque ni los conocemos, y aunque los conozcamos, es muy posible que no sepamos sumarlos.
Con este ejercicio lo que se demostró es que aunque estudiemos y nos examinen de un teorema como puede ser el de Pitágoras, es muy posible que esos conocimientos queden en el limbo y no se utilicen. Es decir, que aunque en teoría, lo que aprendemos en la escuela es para entender mejor la realidad y clasificarla, si no construimos antes las ideas, realmente no sirve de nada lo aprendido en la escuela. Por lo tanto, la enseñanza escolar debería centrarse mucho más en el paso de la acción a la formulación de lo que hemos hecho.
El siguiente ejemplo que vimos en esa misma presentación fue la comparación de áreas. Aquí repasamos lo dado en la clase anterior (los 5 segmentos con los que podíamos crear 8 triángulos). Nos dimos cuenta triangulando, que todos ellos se pueden descomponer en el AAB y el ABD, pero ¿por qué estos dos triángulos son iguales cuando a simple vista no lo parecen? En la escuela aprendemos que 2 triángulos son iguales (tienen el mismo área) si tienen la misma base y la misma altura, sin fijarnos en la inclinación ni otras cuestiones anecdóticas.
Seguidamente, aprendimos que en un geoplano de 5x5 dejamos de trabajar con letras (A,B,C,D) y empezamos a trabajar con coordenadas x e y (1,0); esta nueva manera de formular segmentos se utiliza para no tener que aprenderse e identificar todos de memoria.
Estas coordenadas representan las dos dimensiones en el plano, y con ellas podemos decir el punto donde estamos y el punto donde vamos utilizando letras (álgebra).
Posteriormente, calculamos las áreas de los distintos cuadrados formados por segmentos representados en el geoplano de 5x5 sin fórmulas, sólo contando; y nos dimos cuenta de que con el manejo de geoplanos de 3x3 y 5x5 se aprenden muchas cosas si se trabaja de forma activa (formulando, construyendo, hallando áreas, etc.).
Antes de entrar en la última parte de la clase, observamos una imagen ubicada en el blog, donde se puede observar un aula de infantil donde han elaborado diferentes triángulos en geoplanos de 3x3 sin conocimientos previos de teorías o tipos de triángulos, simplemente construyéndolos y discutiendo la actividad; de esta forma podemos entender que únicamente con la realización de triángulos con gomas o cartulinas, los niños pueden discutir y comparar sus lados y ángulos y de esta forma favorecer la construcción de conceptos adecuados. Van a entender en el futuro mucho mejor lo que aprenden en la escuela si hacen actividades manipulativas.
Después de eso, pasamos a reflexionar sobre lo que nos dice la ley ante cómo hay que trabajar metodología infantil; así que trabajamos con el documento de las orientaciones metodológicas colgado en el campus. Nos paramos a leer 3 ideas del aprendizaje significativo resumidas legalmente (5ª página, 2º párrafo): la 1ª idea (“Aprender de forma significativa […] situaciones y contextos”) trataba sobre lo debatido en clase los dos últimos días, que la gran mayoría de cosas que aprendemos en el aula luego no lo aplicamos en otros contextos y se nos acaba olvidando totalmente y que esto pasa porque se ha aprendido de manera no significativa; la 2ª idea se expone a continuación del mismo párrafo (“Otro de los requisitos […] respondan a sus necesidades”) y la 3ª y última (“En definitiva […] en su entorno”).
Comparamos estas ideas con el artículo de Madruga/Ausubel (colgado en el campus), donde las encontramos sacadas literalmente; y hablamos sobre la importancia de este artículo, que se introdujo directamente en la legislación en cuanto se presentó en nuestro país (en la Facultad de Psicología de Oviedo). Tras esto, leímos las 4 primeras líneas en negrita de este documento (“Este capítulo está parcialmente […] Ministerio de Educación y Ciencia”) y también el final de la última página, donde aparece el nombre del artículo de Madruga (aprendizaje por descubrimiento frente a aprendizaje por recepción: la teoría del aprendizaje verbal), que en realidad es la teoría de Ausubel; y el nombre del libro del cual se saco el artículo (desarrollo psicológico y educación), el cual Josetxu nos recomendó encarecidamente y está escrito por 3 de los catedráticos de psicología más importantes de nuestro país (Cesar Coll, Jesús Palacios y Álvaro Marchesi).
Como tarea para la semana siguiente, se nos propone preparar las preguntas sobre el artículo (ubicadas en el campus), de esta forma relacionaremos lo que estamos haciendo en clase con la lectura de un texto académico de gran relieve y mucha importancia en nuestro país. Estas preguntas se responderán el jueves 4 de marzo en clase, entre todos, discutiendo la respuesta correcta (si se encuentra una); por lo que no será necesario “llevar” las respuestas por escrito, ni subirlas al campus. Con esta actividad reflexionaremos sobre si cuando programamos una unidad didáctica tenemos en cuenta las condiciones adecuadas para que se generen aprendizajes con significación y si no es así, cómo podemos integrarlas.
Leyendo las preguntas nos topamos con el término “organizadores previos” y Josetxu puso de ejemplo el mencionado en clase (sumar cuadrados o superficies no es lo mismo que sumar lados, longitudes o segmentos); y diferenciamos las 6 primeras preguntas (útiles para nuestra formación como docentes) y las 4 últimas (las cuales sólo se pueden utilizar en exámenes de psicología para “pillar” al alumnado y suspenderlo, ya que no aportan nada).
Para concluir, el profesor nos explicó que debemos conocer las ideas de Ausubel porque siguen teniendo relevancia en la legislación educativa de nuestro país y que se introdujeron para justificar y apoyar el constructivismo (la construcción de significados en la escuela). Ligado a esto mencionamos el término “aprendizaje significativo”, el cual supone establecer relaciones, integrar y saber aplicar lo nuevo a otros contextos, y tener una disposición a aprender.
En la clase del día 4 de marzo trabajaremos con las preguntas del artículo de Madruga, hablaremos sobre el aprendizaje significativo (muy relacionado con la construcción de conocimientos) y sobre su autor, David Ausubel (veremos un video de unos niños que le critican sin conocerle); zanjando así el tema de didáctica y construcción de conocimientos en infantil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario